lunes, 16 de noviembre de 2020

 TERTULIA ARTÍSTICA

EL LOBO Y LOS SIETE CABRITILLOS

Autor:       Hermanos Grimm

Edades:    Todas las edades

Valores:    Obedienciaprudenciaresponsabilidad

Había una vez una vieja cabra que tenía siete cabritillos. Los quería mucho y como no quería que les pasase nada malo, siempre insistía cuando se iba a por comida que tuvieran mucho cuidado y no abrieran la puerta a nadie.

- No os fiéis de nadie. El lobo es muy astuto y es capaz de disfrazarse para engañaros. Si veis que tiene la voz ronca y la piel negra será él.
- ¡Síii mamá, tendremos cuidado!

En cuanto la cabra desapareció, apareció el lobo y llamó a la puerta

- ¿Quién es?, preguntaron los cabritillos
- Abridme hijos míos, soy vuestra madre.

Pero los pequeños recordaron el consejo de su madre y no se fiaron.

- Tú no eres nuestra madre. Nuestra madre tiene la voz suave y tú la tienes muy ronca.

El lobo se marchó enfadado por haber sido descubierto y fue directo a la tienda donde se compró un trozo de yeso para suavizar su voz. De nuevo volvió a la casa de los siete cabritillos.

- ¿Quién es?, preguntaron los cabritillos
- Soy yo, vuestra madre.

Esta vez su voz sonaba suave, así que los cabritillos no estaban seguros del todo. Entonces, vieron por la ventana que su pata era negra como el tizón y se dieron cuenta de que era el lobo.

- ¡Tú no eres nuestra madre, eres el lobo! Nuestra madre tiene las patas blancas.

El lobo volvió a marcharse malhumorado pensando en que esta vez lo conseguiría. Fue al molinero y le pidió que le pintase la patita con harina, y aunque al principio el molinero no se fió de él, le entró miedo y acabó accediendo.
De modo que el lobo volvió a llamar a la puerta.

- ¿Quién es?, preguntaron los cabritillos

- Soy yo, vuestra madre.
- Enséñanos la patita para que podamos verla

Al ver los cabritillos que su pata era blanca como la nieve creyeron que de verdad se trataba de su madre y le dejaron pasar. Pero cuando vieron que era el lobo, corrieron despavoridos a esconderse por todos los lugares de la casa. Uno se metió debajo de la cama, otro en el horno, otro en la cocina, otro en el armario, otro en el fregadero y el más pequeño en la caja del reloj.
El lobo fue encontrándolos y comiéndoselos uno por uno, excepto al más pequeño, al que no pudo encontrar.

Estaba tan harto de comer cuando terminó que se fue a tumbar debajo de un árbol y se quedó profundamente dormido.

Entretanto llegó mamá cabra y menudo susto se dio cuando vio que toda la casa estaba revuelta y no había ni rastro de sus hijos. Entonces la más pequeña la llamó desde la caja del reloj, su madre la sacó de su escondrijo y le contó lo ocurrido.

La vieja cabra cogió tijeras, aguja e hilo y fue con el cabritillo en busca del malvado lobo. Cuando lo encontraron cogió las tijeras y le abrió la tripa al animal. De ahí salieron uno por uno sus seis cabritillos vivos.

Todos estaban muy contentos de estar sanos y salvos, pero la madre quiso darle al lobo su merecido y ordenó a los pequeños que fueran a por piedras.

Con astucia, logró la vieja cabra llenar al lobo el estómago de piedras sin que éste lo notara.

Cuando se despertó, tenía mucha sed y al acercarse al pozo para beber agua, el peso de las piedras hizo que se cayera dentro y se ahogara. Los cabritillos se acercaron al pozo y comenzaron a saltar y cantar en corro alrededor de él celebrando que volvían a estar los siete juntos.



Pincha en el siguiente enlace y lo encontrarás


AHORA PIENSA EN QUÉ TE RECUERDA EL CUENTO, POR QUÉ TE GUSTA O POR QUÉ NO.
¿ CREES QUE EN TU VIDA OCURREN COSAS SIMILARES ?
PIENSA Y DISELO A TU MAESTRO O MAESTRA.

GRACIAS Y BUEN DÍA

ANÁLISIS DE SUS VALORES

El cuento nos ejemplifica de una manera sencilla la importancia de la obediencia. Nos cuenta lo que les ocurre a los cabritillos por no haber obedecido a su madre y con ello apunta también a otros valores como son la prudencia y la responsabilidad. Esta historia sirve para hacer entender a los niños que deben ser prudentes con las personas que no conocen. Además les recuerda también las cosas que digan o hagan traen siempre una serie de consecuencias que deberán asumir, de ahí la importancia de obrar bien.

BIBLIOTECA DEL " CEIP SANTA TERESA DOCTORA "

viernes, 13 de noviembre de 2020

TERTULIA ARTÍSTICA

13 DE NOVIEMBRE DE 2020. 


CINDERELLA. LA CENICIENTA.

HOY LOS ALUMNOS Y ALUMNAS DE 1º DE PRIMARIA DEL C.E.I.P. SANTA TERESA DOCTORA HEMOS CELEBRADO UNA LINDA TERTULIA CON EL CUENTO DE LA CENICIENTA. AQUÍ TIENES LO QUE HEMOS HECHO.

COMO AÚN NO SABEMOS LEER BIEN LAS MAESTRAS NOS HAN LEIDO EL CUENTO.

 

Érase una vez un hombre bueno que tuvo la desgracia de quedar viudo al poco tiempo de haberse casado. Años después conoció a una mujer muy mala y arrogante, pero que pese a eso, logró enamorarle.

Ambos se casaron y se fueron a vivir con sus hijas. La mujer tenía dos hijas tan arrogantes como ella, mientras que el hombre tenía una única hija dulce, buena y hermosa como ninguna otra. Desde el principio las dos hermanas y la madrastra hicieron la vida imposible a la muchacha. Le obligaban a llevar viejas y sucias ropas y a hacer todas las tareas de la casa. La pobre se pasaba el día barriendo el suelo, fregando los cacharros y haciendo las camas, y por si esto no fuese poco, hasta cuando descansaba sobre las cenizas de la chimenea se burlaban de ella.

- ¡Cenicienta! ¡Cenicienta! ¡Mírala, otra vez va llena de cenizas!

Pero a pesar de todo ella nunca se quejaba.

Un día oyó a sus hermanas decir que iban a acudir al baile que daba el hijo del Rey. A Cenicienta le apeteció mucho ir, pero sabía que no estaba hecho para una muchacha como ella.

Planchó los vestidos de sus hermanas, las ayudó a vestirse y peinarse y las despidió con tristeza. Cuando estuvo sola rompió a llorar de pena por no poder ir al baile. Entonces, apareció su hada madrina:

- ¿Qué ocurre Cenicienta? ¿Por qué lloras de esa manera?

- Porque me gustaría ir al baile como mis hermanas, pero no tengo forma.

- Mmmm… creo que puedo solucionarlo, dijo esbozando una amplia sonrisa.

Cenicienta recorrió la casa en busca de lo que le pidió su madrina: una calabaza, seis ratones, una rata y seis lagartos. Con un golpe de su varita los convirtió en un magnífico carruaje dorado tirado por seis corceles blancos, un gentil cochero y seis serviciales lacayos.

- ¡Ah sí, se me olvidaba! - dijo el hada madrina.

Y en un último golpe de varita convirtió sus harapos en un magnífico vestido de tisú de oro y plata y cubrió sus pies con unos delicados zapatitos de cristal.

- Sólo una cosa más Cenicienta. Recuerda que el hechizo se romperá a las doce de la noche, por lo que debes volver antes.

Cuando Cenicienta llegó al palacio se hizo un enorme silencio. Todos admiraban su belleza mientras se preguntaban quién era esa hermosa princesa. El príncipe no tardó en sacarla a bailar y desde el instante mismo en que pudo contemplar su belleza de cerca, no pudo dejarla de admirar.

 Cenicienta le ocurría lo mismo y estaba tan a gusto que no se dio cuenta de que estaban dando las doce. Se levantó y salió corriendo de palacio. El príncipe, preocupado, salió corriendo también aunque no pudo alcanzarla. Tan sólo a uno de sus zapatos de cristal, que la joven perdió mientras corría.

Días después llegó a casa de Cenicienta un hombre desde palacio con el zapato de cristal. El príncipe le había dado orden de que se lo probaran todas las mujeres del reino hasta que encontrara a su propietaria. Así que se lo probaron las hermanastras, y aunque hicieron toda clase de esfuerzos, no lograron meter su pie en él. Cuando llegó el turno de Cenicienta se echaron a reír, y hasta dijeron que no hacía falta que se lo probara porque de ninguna forma podía ser ella la princesa que buscaban. Pero Cenicienta se lo probó y el zapatito le quedó perfecto.

De modo que Cenicienta y el príncipe se casaron y fueron muy felices y la joven volvió a demostrar su bondad perdonando a sus hermanastras y casándolas con dos señores de la corte.

   DESPUÉS HEMOS HECHO ESTA FICHA

COMENZAMOS A EXPRESAR NUESTROS SENTIMIENTOS:

Como tutora os cuento que lo que más les ha gustado a nuestros peques es la ropa y calzado del hada madrina y de la Cenicienta, ( a uno le gustaba mucho porque quería mucho a los animales y le recordaba lo bueno que era su hermano con él ). Lo que menos les ha gustdo,  las hermanas. Un niño ha comentado que a él no le gustaba el vestido de Cinderella porque estaba sucio.

Cuando ellos han terminado de expresar todo lo que sentían las maestras hemos dado nuestra opinión;

- Qué buena era Cenicienta, cómo perdonaba y quería a los demás.

-Qué trabajadora, gracias a las personas así el mundo funciona mejor. Los investigadores ahora buscan la vacuna para cuidarnos a todos, eso es porque trabajan sin cesar.

   En este momento se ha establecido un bonito diálogo y todos querían decir algo.

   Hemos quedado muy contentas y los alumnos también.

 

DESPUÉS CADA UNO HA DECORADO EL ZAPATO DE CINDERELLA



Autor:        Charles Perrault

Edades:     A partir de 3 años

Valores:     Bondad

 

SUS VALORES

La historia de Cenicienta es una historia de bondad. La muchacha demuestra su bondad tratando bien a sus hermanas cuando ellas nunca han sido condescendientes con ella y la lleva al extremo cuando estas le piden perdón y las perdona sin pensárselo ofreciéndoles su cariño incondicional.

 

FELIZ FIN DE SEMANA. PEDIDLE A VUESTROS MAESTROS Y MAESTRAS QUE OS DEJEN LEER EL CUENTO Y LUEGO CONTAR JUNTOS LO QUE SENTÍS AL LEERLO.